Transcurre la noche y en su pasar suena a lo lejos
apenas una llovizna
que moviliza mis deseos.
Cansada del ritmo monótono.
Ya no se más quién soy.
No sé qué más quiero.
Caigo y vuelvo a levantar.
Erro y aprendo.
Intento. A veces pierdo.
Esto de la vida a veces se torna a juego.
¿Qué es ganar y qué es perder?
Resumo entre líneas que pierdo el credo.
Abrevio en mis manos el sabor del encierro.
Una prisión sin rejas.
Un vayven de ensueños.
Y mientras pasa la noche
al igual que la vida
me persiguen cuestiones
en tiempo y medida.
Más sigo buscando en cada libro,
en cada esquina
en cada imágen
en cada rima.
Y así transcurren las horas
mientras me abriga esta llovizna.
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